No. Quizás la gente piense que lo mejor es ser yo. Estar sin tener preocupaciones, sin estudiar ni trabajar. Pero no. No saben que ser el personaje del videojuego, es el trabajo más difícil.
No puedo hacer lo que quiero. Si él quiere que vaya a la izquierda, tengo que ir. Si aprieta uno de mis rivales los botones, tengo que obedecerles.
Subir y bajar del auto, chocar y arreglar. Que la policía me persiga y que me arreste. Robar, pegar, matar: me rompe el corazón. Ver toda esa sangre, me sigue dando escalofríos.
Me hace meter por bosques oscuros y lluviosos … horribles. Dan miedo.
Olvidate de vivir.
Morir miles y miles de veces, para que aprieten tan sólo un botón, y vuelva a revivir.
Me encantaría ser como ustedes. Poder hacer lo que quiera. No hacer maldades. Sentir el calor en la piel. Sentir que se broncea y toma ese hermoso “color verano”. Abrigarse en las noches frías. Sentir las gotas de lluvia, chocar con un dulce golpe tu cabeza, y escaparte, para no mojarte, tapándote con los paraguas, libros, o con las mismas manos.
Ver las verdaderas flores crecer. Que las amarillas hojas caigan en otoño, formando un colchoncito para los perros.
Así que, como ya ves, mi vida … no es perfecta …
Mi vida … no es vida.
Mi vida … depende de un aparato electrónico.
Mi vida … no existe, tan sólo soy un personaje de un videojuego, que tiene sentimientos.
Micaela
