Un día yo fui con mi padre a buscar un árbol de navidad.
Primero fuimos al supermercado Norte, pero había solamente árboles chiquitos y nosotros buscábamos uno más grande.
Fuimos a todos lados y yo le dije a mi papá:
_ No pa … falta ir a Bernal.
_ Ah, cierto, vamos hija.
_ Bueno.
Fuimos a Bernal y por fin encontramos el árbol. Después fuimos a comprar los adornos y armamos el árbol de navidad.
Romina