Ezequiel, Florencia y Sabrina
eran el grupo más perfecto de amigos que pude haber conocido.
Hasta que un día esa linda imagen se vio rota. Lo que pasó fue que Ezequiel y Florencia se pelearon por razones inexplicables. Pasó una semana y ninguno de los dos cedía para arreglarse. Ninguno de los dos veía lo que sufría Sabrina, sólo veían sus diferencias. Ella se demoronaba de tristeza.
Un día Ezequiel y Florencia fueron a la casa de Sabrina justo a la misma hora. Los atendió la mamá y les dijo:
_ Sabrina no sale de la cama hace una semana, se la pasa llorando.
Ninguno de los dos se dio cuenta del daño que le hacían a su amiga. Tocaron a su puerta. Cuando salió Sabrina y al verlos se les tiró encima y los tres amigos volvieron a estar juntos.
Manuela