el blog de los pequeños escritores

La lectura conduce al deseo de escribir.

En el taller literario, la palabra tiende a sumar otras palabras.

La intención fluye como el agua. Lo importante … es la sed.

martes, 14 de junio de 2011

en una luna más linda

 


Había una vez una nena llamada Nara que cuando un día fue a la escuela se imaginó que estaba en la luna más linda. 
Ahí vió el sol, Marte, Plutón, Júpiter y Saturno, y dijo ¡qué lindo es el espacio!
Mientras que la seño explicaba la prueba para que pasaran al pizarrón se fue a fijar al registro.  La que iba primera era Nara, pero ella no escuchaba lo que decía la señorita.
Ella dijo: “Aquí Nara en el pizarrón”, pero Nara seguía en la luna más linda, y todos sus compañeros la miraban.
La seño se acercó para ver qué le pasaba y si copió la tarea.  La señorita vió que su hoja estaba en blanco. 
Entonces, agarró el borrador y golpeó contra la mesa e hizo ¡PLAF, PLAF, PLAF!  Nara escuchaba un sonido.  Saltó de la imaginación y la seño le dijo con cara de enojada:  “¿Nara me podés explicar por qué no me escuchás y por qué no copiaste la tarea?”.  Y Nara le contestó:  “No copié porque estaba en la luna más linda”.  La seño le dijo: “Traeme tu cuaderno que te voy a poner una nota para tus padres”.
Nara no iba tan contenta a su casa.  A la hora de comer Nara les mostró la nota que decía:  “Señores padres,  Nara hoy no ha copiado la tarea y no pasó al pizarrón, porque estaba en la luna más linda”.   La mamá le dijo a Nara:  “¿Otra vez Nara en la luna más linda?”.  Y Nara le contestó:  ”Sí, me distraje en la imaginación, pero igual vos me seguís queriendo ¿no?”.  La mamá le dijo:  “Sí, yo te sigo queriendo Nara, pero no lo hagas más”.  “Sí.  no lo hago más, mami”, contestó Nara.
Romina